Un estudio revela que podrían evitarse entre 2013 y 2060 1,8 millones de muertes por causas atribuibles al tabaquismo, si utilizamos políticas de reducción de daños.
Este estudio fue publicado el 17 de abril de este año en la prestigiosa revista Population Health Metrics. Titulado “Implicaciones para la salud pública del vapeo en los Estados Unidos: el modelo de simulación de fumar y vapear”.
Tomando como parámetro “muertes atribuibles y años de vida perdidos”, siguiendo los patrones de uso y sustitución por dispositivos de liberación de nicotina en los Estados Unidos, se investigó en dos escenarios:
Uno en la cual los productos de vapeo con nicotina se pueden comprar sin limitaciones (1) y los fumadores los adquieren para abandonar el tabaco y otro en donde la venta de productos de vapeo está limitada o no permitida (2).
En el primer escenario (1) de la investigación se descubrió, que si los fumadores se pasan al vapeo se evitarían aproximadamente 1,8 millones (1,3 millones de hombres, 0,5 millones de mujeres) de muertes atribuibles al tabaquismo, esto significaría una reducción relativa del 10,4% en comparación con el escenario (2), y se salvarían 38,9 millones de años de vida perdidos (28,7 millones de hombres, 10,1 millones de mujeres) atribuibles al tabaquismo y al vapeo, una reducción relativa del 19,9%.
En resumen, aunque siendo un poco cautelosos aclaran los investigadores, si se adoptaran medidas de sustitución adecuadas, e incluso con seguimiento médico, la sociedad ganaría en salud pública, bajando los índices de mortalidad asociada al tabaquismo.
La investigación fue liderada por David T. Levy del Centro Oncológico Integral Lombardi de la Universidad de Georgetown con la participación de investigadores de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Yale y del Departamento de Epidemiología de la Universidad de Michigan.
Fuente: Public health implications of vaping in the USA: the smoking and vaping simulation model